¿Qué es un capsule wardrobe y por qué puede ser la solución a tus problemas?
¿Qué es un capsule wardrobe?
Muchas veces nos pasa que compramos algo “porque es lindo” y luego nos damos cuenta de que no nos queda bien o de que no tenemos con qué combinarlo. ¿Te suena? Y así vamos acumulando prendas y más prendas sin sentido… y terminamos usando las mismas cosas siempre.
El concepto de “cápsula” no solo refiere a una forma de ordenar el armario, sino también a una forma diferente de comprar ropa. La idea es que tengas un ropero con un máximo de 40 prendas, sin contar ropa interior y piyamas, pero sí zapatos y carteras. Y que a esas 40 prendas puedas combinarlas de diferentes maneras para crear muchos looks.
¿De dónde salió esta idea?
La idea surge de Susie Faux, la dueña de la boutique londinense Wardrobe, en 1970. La diseñadora Donna Karan la revivió en 1985 con una colección cápsula de tan solo siete prendas, y hoy en día fue Caroline Rector la que trajo de vuelta el concepto con su blog de moda llamado Unfancy, donde mostraba su forma de vestir minimalista.
¿Por qué tener un capsule wardrobe?
Hay muchísimas razones para tener un capsule wardrobe. Hoy te muestro algunas para que tengas en cuenta:
- Ocupás menos espacio y, por ende, podés tener el ropero siempre mucho más ordenado.
- Es más fácil armar un outfit, porque todas tus prendas son versátiles y se pueden combinar fácilmente: para ir al liceo, para salir con amigos, para ir a un cumpleaños de 15… En consecuencia, ahorrás tiempo a la hora de elegir qué ponerte.
- Ahorrás plata. Muchas veces compramos por comprar, porque algo es lindo y nos dejamos llevar por nuestras emociones, porque estamos tristes y queremos darnos un gusto… Y después no sabemos qué hacer con esa remerita que nos queda remal y no combina con nada.
El capsule wardrobe nos da un marco para comprar ropa a futuro. Hace que sea mucho más fácil porque ya sabés cuál es el estilo de prendas, los colores, etc.
Salimos así de la idea de fast fashion, que es la era de la moda que vivimos, en la que comprar ropa es bastante accesible, las colecciones cambian todo el tiempo y se nos genera esa necesidad de comprar para estar a la moda. Esa ropa no solo no tiene buena calidad (por lo que se rompe o desgasta rápidamente y no nos queda tan bien como debería), sino que es producida en situaciones de explotación por mujeres como vos (sí, de tu edad) en la otra punta del mundo, que trabajan jornadas extensas de al menos 12 horas y por sueldos míseros.
Una forma de cambiar esto es dejar de consumir así: pensar el guardarropas, elegir pocas prendas pero de calidad, en lo posible creadas de una forma sustentable (sí, porque la fast fashion también daña el medio ambiente) y sin un régimen de explotación para los empleados de la marca.
Cómo armar tu capsule wardrobe sin morir en el intento
Lo primero que tenés que hacer para crear tu capsule wardrobe es analizar tu ropero actual. Sacá toda la ropa que tenés y separala en tres montoncitos: ropa para tirar (ropa que no tiene un estado por el que puede ser usada: está rota, muy manchada, etc.), ropa para quedarte (ropa que te gusta mucho y que siempre usás) y ropa para donar o vender (ropa que está en buen estado, pero que no usás porque no te queda bien, ya no te gusta o no es combinable).
Digo donar o vender porque puede que te interese donarla (podés encontrar dónde y cómo hacerlo acá, pero también puede que te interese aprovechar esa ropa y venderla para obtener algo de dinero. Eso podés hacerlo subiendo álbumes de fotos en tus redes sociales, averiguando en tiendas second hand o también en Me Cansé.
Después de eso tenés que ver, del montón de ropa que te gusta, cuáles son sus posibles combinaciones. La idea es que toda la ropa combine entre sí, así podés crear muchos looks diferentes.
Para armar el capsule wardrobe debés tener en cuenta lo siguiente:
– Un 15% de tus prendas deben ser piezas únicas, es decir, cosas más llamativas: bufandas de colores, una camisa con un diseño llamativo, un collar particular…
– Un 35% tienen que ser prendas para todos los días: camisetas, jeans, vestidos, polleras que sean fáciles de combinar.
– El restante 50% deben ser básicos. Eso quiere decir prendas que combinan con todo y que tienen colores neutrales (blanco, negro, gris, beige). Camisetas, camisas lisas, vaqueros clásicos, zapatos de taco, un buen par de championes, un abrigo que combine con todo…
Como ves, armar un capsule wardrobe puede ser difícil al principio, pero una vez armado es muy fácil y tiene un montón de beneficios para vos, para el medio ambiente y para cambiar un concepto errado de la moda. ¿Te animás?
Amo las papas fritas. Machista en reconstrucción hacia un feminismo que nos libere. Una vieja de alma en un cuerpo relativamente joven. Escribo, corrijo, edito, leo, duermo