Cómo leer un horóscopo
[Opinión]
Pero el horóscopo no es originalmente ese espacio en el diario. La palabra horóscopo indica la necesidad de “ver la hora”. ¿La hora de qué? De nacimiento. El horóscopo no es el texto que adivina, sino literalmente la acción de observar una carta natal. Obviamente, quien está detrás de la línea editorial de una revista jamás podrá saber la hora de nacimiento de todos sus lectores y, aunque lo supiera, sería una tarea titánica.
¿Sirve leer estos horóscopos?
No leas horóscopos: esa sería mi gran recomendación. Los horóscopos son como querer otorgar un rol social en base a un sexo: toman una fracción de un cuerpo y la amplifican a una vida entera, obviando datos esenciales. Lo único posible finalmente es la generalización, y ella no solo implica homogeneización de cosas que no son iguales ni deben serlo, sino que además puede llevar a errores peligrosos.
¡Igual quiero leer!
Sii no te aguantás y vas a leer el horóscopo, entonces te invito a que pensemos algunos puntos para hacerlo:
- Primero leé tu signo ascendente y después, como complemento, tu signo solar. Los horóscopos están basados en una tentativa de dónde “debería” caer cada signo en tu carta. Por supuesto, puede fallar.
- Fijate que los tips amorosos no sean heteronormativos.
- Tené en cuenta que un horóscopo debe tener un final abierto o, al menos, dejar algo a la imaginación del lector o la lectora. Nadie puede decirte qué es lo que te va a pasar, pero sí pueden recordarte las herramientas que tenés y las flaquezas que es importante que no olvides.
- Leé el horóscopo en clave de invitación a actuar, pensar o evaluar, no como un dictamen de algo que va a ocurrir. En vez de leer: “vas a tener una charla importante hoy”, reformulalo en: “¿con quién podría tener una charla importante hoy?”.
Por último, lo más importante es que si el horóscopo te divierte, te es útil y te hace sentir bien, ¡a por ello! Las herramientas de crecimiento que necesitamos a cada momento pueden estar ocultas en cualquier lugar. Si te sirve, ¡entonces hacelo valer!
Ilustración: Ini Muller