Harta lectura: mundos fantásticos
La fantasía fue y es la vía de escape para muchos, es verdad, y por eso se la mira a veces con prejuicio, como si valiera menos. Sin embargo, es un género igual de válido que otros, en el que podemos encontrar historias maravillosas, profundas y que no van a abandonar nuestras cabezas jamás.
Los mundos fantásticos son, a menudo, lugares increíbles que moriríamos por visitar. Nos hacen desplegar nuestra imaginación y viajar por sus rincones más recónditos. Por eso, hoy quiero hablar de varios mundos de fantasía que vale la pena conocer, ¿me acompañás?
Martina Valiente, de Federico Ivanier
Para empezar, la recomendación es Martina Valiente, primera obra publicada de este conocido escritor uruguayo. El motivo más importante para leerla es que Martina es una adolescente como vos. En general, las historias de fantasía parecen pasarles a otros, pero Martina es uruguaya y de una forma misteriosa termina envuelta en increíbles aventuras en un mundo fantástico con una magia muy particular.
Esta trilogía no solo es emocionante y divertida, sino que toca temas más profundos como la amistad, el bullying y los lazos familiares. Tiene de todo para engancharte y dejarte con ganas de más.
Memorias de Idhún, de Laura Gallego
Esta saga de fantasía fue escrita por una autora española que marcó a toda una generación. Idhún es un mundo súper complejo, con varias razas y una historia muy rica. A pesar de esto, la historia es muy ágil y se lee sin poder parar. Las emociones que despiertan sus protagonistas Victoria, Jack y Kirtash —de quienes nos haría bien cuestionar qué tan sana es su relación— son verdaderamente intensas y, si no me creés, basta con preguntarle al fandom.
En Idhún ya no hay dragones ni unicornios, pero sí hay sheks, que son algo así como serpientes aladas. En Idhún hay tres soles y tres lunas, uno por cada dios y diosa. Y está el Séptimo. Idhún debe ser salvado, y para eso van a buscar a Jack y a Victoria, que son mucho más de lo que aparentan ser… ¿No te morís de ganas de saber por qué?
La reina impostora, de Sarah Fine
Si esta saga te resulta poco conocida, quiero confesarte que a mí también me pasó. No son libros que hayan tenido mucha publicidad, pero es un mundo que vale la pena conocer. Su organización y su magia son bastante diferentes a las típicas novelas de fantasía, y también la forma en que los personajes se relacionan: por ejemplo, la protagonista, Elli, se siente atraída tanto por hombres como por mujeres, algo poco usual en la literatura juvenil. Elli fue criada como la sucesora de la actual reina, pero cuando esta fallece y es su turno de tomar el poder, las cosas no salen como deberían.
En esta novela se habla de los elegidos, de serlo o no serlo, pero también se cuestiona la forma en que ese país está gobernado y cómo trata a quienes disienten con sus ideas. Es una saga muy interesante y que toma rumbos diferentes a la mayoría de las historias de este estilo.
Hija de humo y hueso, de Laini Taylor
Elegir qué libro de Laini Taylor recomendar fue muy difícil, porque todo lo que escribe esta autora es maravilloso. Esta es la saga con la que la que se hizo conocida, y por buenas razones. La protagonista, Karou, es una chica con una personalidad muy fuerte, independiente y con mucho talento. Además, su familia está compuesta por unas criaturas llamadas quimeras, de las que no sabemos mucho, solo que tienen una tienda de deseos y que Karou consigue dientes para ellos.
¿Suficientemente raro? También hay ángeles, pero no son los que conocemos, sino que vienen de otro mundo y sus intenciones respecto a las quimeras no son las más amistosas. Esta novela es intensa, está llena de personajes adorables y es la introducción a un mundo increíble, que podría ser cliché, pero se las arregla para no serlo (y eso que incluso hay un amor prohibido en el medio). Encima, sobre el final, da un giro que cambia todo. Como para salir corriendo a buscar el segundo. Así de increíble.
Entonces, ¿cuál vas a leer primero?
Sofi Aguerre Leo, escribo, reseño, corrijo y traduzco. Hago muchas cosas y me quejo de que no tengo tiempo. Fan del otoño, el té, los gatitos y las cosas brillantes.